La probabilidad de que una mujer no reciba tratamiento adecuado para una enfermedad cardiovascular es mayor que la de que un hombre pase por la misma situación.

– Cómo lo supieron?
En 1991, Bernardine Healy (primera directora mujer de los Insitutos de Salud estadounidenses) observó el fenómeno revisando estadísticas y lo llamó Síndrome de Yentl.
A lo largo del tiempo, estos datos se siguen verificando Por ejemplo en 2013 en España, el 30% de las muertes se debió a temas cardiovasculares. Estas patologías significaron la causa de muerte para un 26,7% de los varones y un 33.6% de las mujeres. O sea que las fallas en el corazón son más mortíferas para las mujeres que para los varones.
– En qué avanza el estudio?
En 2016 en una publicación para Aeon, Valeria Morabito identifica tres causas para lo que se conoce como la «heart attack gender gap» (o por qué la misma cardiopatía suele tener consecuencias más graves si se presenta en mujeres). La autora señala en primer lugar, que incluso en las primeras etapas de ensayos famacológicos (con animales no humanos), se suelen utilizar sujetos machos y sus conclusiones se trasladan a hombres blancos. En segundo lugar, señala que las diferencias ambientales, culturales, sociales y psicológicas entre varones y mujeres crean diferencias en la manera de comunicar una determinada dolencia y cambian las probabilidades de ser correctamente diagnosticadxs. En tercer lugar, la autora dice que las mujeres suelen presentar síntomas «atípicos» (por ejemplo, en casos de infarto las mujeres no suelen tener dolor en el pecho, sino en la espalda o cuello o no tener dolor).
– Para qué sirve?
Este es un ejemplo más de la necesidad de incluir variables de sexo y género al tipificar patologías y tratamientos. El sujeto modelo de la medicina ha sido históricamente el hombre blanco, y eso aumenta las probabilidades de ser mal diagnosticados o recibir tratamientos inadecuados para todos los que no lo somos.

http://mujeresconciencia.com/2016/12/26/el-sindrome-de-yentl/